miércoles, 3 de noviembre de 2010

CASTELLÓN DE LOS MIRABETES

Sábado, 30 de octubre de 2010.

Hoy os cuento el día de Ruta junto con el Club de Senderismo Peñón del Toro, siendo nuestro guía Jesús Puente.
La excusa: visitar el CASTELLÓN DE LOS MIRABETES en término municipal de PUEBLA DON FADRIQUE (GRANADA).


Ver LOS MIRABETES en un mapa más grande


Ver LOS MIRABETES en un mapa más grande
Os pongo el mapa de la ruta en dos partes, pues no sé porqué no me deja juntarlos en uno.

Iniciamos la caminata en la puerta que conduce al OBSERVATORIO ASTRÓNOMICO COLLADOS DE LA SAGRA, donde dejamos los coches y nos pertrechamos bien pues la mañana estaba fría y húmeda.


Y nada más andar unos pocos metros nos encontramos esta estampa:


El caballo (¿será el blanco de Santiago?) ni se inmutó al acercarnos pues me imagino que estará más que acostumbrado al humano; es más, incluso se dejó fotografiar con una pose que ya querrían para sí muchas modelos. La imagen no puede ser más bucólica: caballo, cortijo, valla, árbol otoñal y de fondo nuestra querida montaña: LA SAGRA.


Durante el ascenso inicial llegamos al BARRANCO DEL MAGUILLO donde parece ser que los intrépidos practican la escalada y es que es ideal para ello. Al fondo la SIERRA DE LA GUILLIMONA la que espero pronto patear su cuerda.


Una vez completado el primer collado nos encontramos de frente el CASTELLÓN DE LOS MIRABETES o más bien dicho LOS CASTELLONES pues son dos: uno más bajo y el más alto. Al fondo del valle el CORTIJO DE LOS MIRABETES donde hicimos la primera parada para reponer fuerzas y afrontar la empinada subida que nos esperaba.



A nuestra izquierda se dio la voz: ¡viene lluvia! y llegó aunque nos dejó terminar sin mucho problema nuestra ruta.


La subida al primer castellón fue durilla (un 47 % de desnivel) pero es que estamos hechos para todo y pasito a pasito fuimos para arriba. Este castellón es inexpugnable. Para llegar a todo lo alto hacían falta cuerdas y como somos andarines y no escaladines (esta palabra no existe pero me gusta como suena) lo dejamos pasar y continuamos nuestro ascenso al segundo castellón, en cuya base nos encontramos con esta expléndida formación rocosa la que nos demuestra que los humanos aprendemos siempre de la Naturaleza (no me digáis que no parece hecho a posta con adobes).


Abajo el primer Castellón y La Sagra al fondo, cubierta su cima por las nubes que la mantuvieron tapada todo el día.



Ascendiendo a la cumbre del Castellón más alto.


Donde las imágenes, a pesar del día, son majestuosas y te llenan todo el cuerpo.




Antes de subir me habían hablado de los restos de civilizaciones antiguas que quedan en este Castellón. La verdad es que no son muy apreciables pero algo queda. He intentado averiguar a qué época pertenecen pero parece ser que, o no están lo suficientemente estudiados, o yo no los he encontrado: pueden ser argáricos, íberos, romanos o musulmanes. 

Quizá existió un castillo (¿de ahí el nombre?) pues se ven restos de muralla, bases de viviendas o fortificaciones y alguna cisterna.

Si alguien que me lea sabe algo más le pido que nos ilumine y así vamos aprendiendo todos.









El descenso lo iniciamos rodeando el Castellón por su parte Suroeste y caminando entre piedras desprendidas llegamos a su zona Sureste donde nos encontramos grandes moles de roca desprendida del mismo, gracias a la acción del agua y el viento (que como dicen: todo lo puede).


En esta foto observad la enorme grieta que amenaza con desprender en un futuro próximo otro gran trozo de roca.









Gran vista por donde salimos de Los Castellones donde nos encontramos un álamo, mejor dicho "EL ÁLAMO SOLITARIO" junto a un abrevadero del ganado.





Y antes de irme no pude resisitr darle un achuchón en homenaje al grupo de facebook de mi amigo Luis Romero.


Como podéis comprobar la climatología del día no daba para muchos colores, pero para muestra un botón: el FRUTO DE LA PEONÍA. Abierto de par en par, deja ver las semillas negras con los que antiguamente se hacían collares y pulseras para los niños/as a fin de prevenirlos contra los malos espíritus y dicen que también contra la epilepsia. Este fruto contiene un alcaloide venenoso y gran cantidad de aceite.


Después de comer bajamos por una rambla donde por momentos se puso la cosa algo complicadilla pues tuvimos que hacer uso de piernas, brazos y "donde la espalda pierde su digno nombre" (oseasé "arrastraculos"), pero todos llegamos sin contratiempos al auténtico Nacimiento del Río Guadalquivir: LA FUENTE DE MONTILLA... pero eso es otra historia que algún día os contaré.


4 comentarios:

  1. Un nuevo paseo lleno de encanto y buenas imàgenes. Los "Castellones" esos, son dignos de verse.
    Gracias Santi, tu si que eres apañao.

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  2. no está nada mal el paseo, lo mágico de esos sitios es imaginar lo que pudo pasar ahí mismo donde pisas, hace mucho tiempo. muy bonitas vistas e inmejorables comentarios. de isa con cariño

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  3. Buen reportaje con unas bonitas fotos. Saludos.

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