El otoño ya ha coloreado nuestras sierras con todas sus fuerzas.
Domingo, 6 de noviembre de los corrientes.
El CLUB DE SENDERISMO PEÑÓN DEL TORO ha programado una singular ruta por estos lares de la SIERRA DE SEGURA con JESÚS PUENTES de guía, gran conocedor de la misma.
El día no pintaba muy bien, daba lluvia para la tarde, pero como el mundo es de los valientes para allá que nos fuimos.
Después de 2 horas de coche (se hace larguillo) y habiendo tomado café en SANTIAGO LA ESPADA (JAÉN) llegamos a la aldea de HUELGA UTRERA donde ni gatos se veían a esta temprana hora.
Antes hicimos una paradilla bajo unos riscales imponentes y junto a la carretera esta inmensa noguera se dejó fotografiar mientras los niños practicaban con la onda.
El RIO SEGURA a nuestra derecha.
La estampa desde el mirador es única.
A nuestra izquierda grandes paredes de piedra chorreantes con tintura negra.
Uno de los pocos rayos de sol de este nublado día nos alumbró los arces de esta ladera.
El musgo fue una constante. Verdes y amarillos, bonita combinación.
La visita al CHARCO DEL HUMO fue de lo más provechosa y aunque la llegada era bastante resbaladiza, con maña y cuidado me traje unas instántaneas preciosas.
La parada a comer fue en la puerta de la hermosa CUEVA DEL AGUA. El nacimiento está bajo una gran mole de piedra y durante muchos años ha estado regando las huelgas de más abajo. Hoy día va al río Segura y seguramente regará tierras más lejanas
Detalles del interior de la cueva.
Nacimiento del agua.
Reflejos en agua recién nacida.
Vistas desde el interior.
Vista desde el exterior
Con la tripa llena y las piernas algo más relajadas iniciamos una fuerte subida hacia la aldea de POYOTELLO (vaya topónimo curioso el nombrecito de esta aldea, más serrano no puede ser).
Un traguito de agua en la fuente, un paseo por las escasas calles sin gente y para abajo a desandar lo andado con la tarde iniciándose.
En la subida y a través de un agujero en la tierra vimos formaciones de columnas (estalagtitas y estalagmitas una vez unidas) así que a la bajada decidimos investigar y fue una grata sorpresa encontrar al aire lo que algún día fue una cueva por cuyo techo gotearía el agua sin cesar para su formación.
Y esto fue todo lo que dió el día de hoy. Nos escapamos de la lluvia pues no cayó ni gota. Un precioso lugar de esta sierra el que perfectamente podría haber servido para rodas los exteriores de las películas El Señor de los Anillos.
Os dejo la foto con la ruta en Google Earth y su desnivel.
Pero no queda todo ahí. Llegando a HUÉSCAR el último rayo de sol de la tarde nos incendió el CERRO TROMPETA como despedida de una gran jornada.