lunes, 10 de octubre de 2011

ATALAYA DEL TARAHAL o FUENTE AMARGA

En esta tarde del mes de agosto me acordé que tenía una visita pendiente a la ATALAYA DEL TARAHAL también llamada de FUENTE AMARGA.

Se encuentra en el término municipal de GALERA, a pocos metros de la carretera que une HUÉSCAR con CASTILLÉJAR, al pie de la CAÑADA DE FUENTE AMARGA. 

Desde la misma se divisa una amplia zona de la Vega de Castillejar y la zona de TORRALBA donde hubo un villa turística romana, pero eso será seguramente una entrada próxima de este blog.

Con una altura de unos 8 metros y una anchura de 4 metros (a ojo de buen cubero) nos sigue ofreciendo una hermosura que todavía perdura.



Como podéis ver está algo deteriorada pues el paso del tiempo puede con todo, no digo nada con la mampostería unida con argamasa que utilizaron los musulmanes.
Fue el rey ISMAIL I quien en el s. XIV ordenó construir esta serie de Atalayas en la vasta frontera con Castilla como auténticas torres vigías para aviso de todo el personal ante las incursiones cristianas. Los vigilantes, más solos que la una (si es que no iban en parejas como la Guardia Civil) pasarían muchas horas de trabajo junto a esta edificación, preparada de tomillo, esparto o retamas y dispuestos a prenderles fuego ante cualquier cosa rara que contemplaran y hacer las avisadoras "ahumadas".


 

 
La tarde se estaba acabando, había que irse pero antes me llevé esta imagen del atardecer, con esos últimos destellos que parecen decir "hasta mañana".


En el camino de regreso me encontré con estas nubes en formación que en pocos minutos empezaron a darme patadas en el culo pues .... la tormenta estaba muy pero que muy cercana.




 En próximas entradas, que espero no distanciar mucho en el tiempo, os iré enseñando el resto de ATALAYAS DE HUÉSCAR Y SU COMARCA

5 comentarios:

  1. bonitas fotos de la puesta de sol con la atalaya, y muy buena entrada cultural.

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  2. Listo Ismail I, logró recuperar varias plazas fronterizas como Baza y Huéscar, para ello utilizó cañones. Santi, alguna de tus fotografías de la atalaya me recuerdan al perfil de un moái.

    Si sigues por este camino me tienes conquistado, soy un amante de la historia de los siglos XIV, XV y XVI de nuestra tierra.

    Un abrazo.

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  3. -- Muchas gracias Sofía. Es para mi un placer leer tus comentarios pero es más saber que siempre estás ahí.
    -- José Fidel, no sabes la gozada que fue ver atardecer ese día, mi cámara y yo volvimos a Huéscar pletóricos, hasta estuve haciendo de vigilante en la atalaya pero no llegó el enemigo (imagino que estaría igual de ensimismado con el atardecer). Salu2 primo.

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  4. Que alegría ver como quedan personas que se interesan por estas construcciones. Por cierto me gusta tu comentario de que hiciste de vigía por una tarde contemplando la caída del sol.
    Saludos desde Mágina.
    Angel del Moral

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  5. Gracias Angel, próximante iré poniendo entradas del resto de Atalayas de mi zona.
    Lo bueno de estas torres es que aún olvidadas por muchos siempre están ahí, bueno hasta que se desmoronen que todo puede pasar.
    Salu2.

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