Sábado, 10 de diciembre del casi terminado año 2.011.
Hoy tocaba ruta con el C.S. PEÑÓN DEL TORO, La zona a patear era la SIERRA DE CASTRIL, nuestro guía PEDRO PINILLOS, gran conocedor de la misma, y el lugar concreto LAS MARGARITAS.
Desde que salgo a las sierras como miembro de este club senderista he oído hablar de LAS MARGARITAS y hoy, por fin, voy a ir a visitarlas y saborearlas.
Nos juntamos 15 personas: PEDRO PINILLOS, Mª JOSÉ, EVA, LOLI, ANA MARI, FRANCIS, JESÚS PUENTE, JUANI, ALFONSO, Mª CARMEN, OSCAR, JESUS SALINAS (de Caravaca), DIEGO GARCIA (del Pinar de la Horadada) y el que escribe.
El punto de salida fue en el PUENTE DE PINO HERMOSO, dejamos los coches y comenzamos a andar por el Sendero que llega al BARRANCO DE LA MALENA donde nos recibió una cascada algo menguada en esta estacion invernal.
Y a partir de aquí hubo que quitarse el abrigo y colgarlo de la mochila pues iniciamos un prolongado ascenso para seguir ascendiendo por un zigzagueante sendero de piedra de magnífica construcción y no peores vistas.
Al final del mismo ya estábamos resoplando y tuvimos que hacer la primera parada técnica. La vista a atrás era impresionante a pesar de la neblina que nos trajo el día.
Afrontamos el primer descenso peligrosillo. Su pendiente y el barro acumulado nos hizo bajarlo con sumo cuidado sin perder de vista nunca nuestros pies pues cualquier resbalón nos haría caer cual muñecos de trapo.
Ante nuestros ojos se dejó ver el COLLADO DE LAS MARGARITAS.Y para arriba que fuimos a su conquista.
Me cuentan que en la primavera está esplendoroso de flores y, seguramente, de margaritas (de ahí su nombre) pero hoy no será así. Lo que sí comenzó a verse fueron setas de cardo, muchas, hubo algunos que se trajeron la cena de esa noche.
Desde aquí las vistas del BARRANCO DE TÚNEZ son insuperables. Inmensos hachazos han esculpido esta zona y forman un grandioso embudo que recoje todas las aguas de este lugar.
Y de nuevo a bajar se ha dicho, por el sendero de las ocho curvas (aunque yo creo que hicimos menos).
Por aquí habíamos bajado; uffff da mas susto esta vista que cuando estás en él aunque no me digáis que no es precioso.
La próxima parada sería en la PEÑA DEL CABALLO que tantas veces he visto fotografiada. Os aseguro que el directo supera con mucho a la foto. He hecho todo lo posible por tratar de mostraros su inmenso porte, no sé si estará conseguido, lo que sí queda claro es, como siempre, la gran esculpidora (Mater Natura) hizo aquí un trabajo.
Rodeando al caballo la sorpresa es que no era uno sino dos (el padre y el hijo) los que están juntos, aunque el caballo padre, quizá por el paso del tiempo está algo más entrado en carnes.
En este punto, animados ya por la caminata y las sensaciones decidimos alargar más la jornada para llegar hasta el CORTIJO DE LA PUERCA y, tras hacer la comida oficial en el ARROYO (hoy seco) DE TÚNEZ. Con la panza llena y algo descansados para arriba que nos fuimos de nuevo, no sin antes admirar este bello ejemplar de MACROLEPIOTA conocida vulgarmente como "PARASOL".
Así como este retorcidísimo ejemplar de pino que a pesar de los pesares para arriba que ha tirado.Y este pino bandera seguramente nos había visto durante todo el día expectante a nuestra llegada.
En esta subida y a nuestra izquierda se levanta esta roca cual espolón o quilla de barco se asoma al BARRANCO DE TÚNEZ, pregunté por su nombre y nadie lo sabía, he investigado y no he dado con él por lo que quién vea esta entrada y lo sepa que no dude en hacer comentario y decírmelo pues siento gran curiosidad.
Más a nuestra zoqueta se levanta impasible el pico más alto de la SIERRA DE CASTRIL: el EMPANADAS el que pronto visitaré.
Y atrás, ya lejos, LAS MARGARITAS nos decían hasta luego creo que como nosotros encantadas con haber compartido este día.
Llegamos a LA PUERCA y mientras los/as seteros/as hacían acopio de las mismas, PEDRO, JESUS SALINAS y yo subimos para visitar, fotografiar y recojer agua fresquísima de la FUENTE DE LA PUERCA.
La bajada hasta el camino que nos llevaría al punto de salida la hicimos por el SENDERO DE LA PUERCA, de nuevo a zigzaguear pero esta vez para abajo.
En resumen, casi 16 kms de constantes subidas y bajadas pues llaneamos muy muy poquito, más de 7 horas de disfrute serranil y una jornada muy provechosa en gran camaradería.
Al llegar a casa el día me regaló este bello atardecer que presagiaba lo que llegó al día siguiente: la lluvia.
Foto de la ruta y el perfil de elevacion en Google Earth.